Pastel de cabracho asturiano
En Asturias, el cabracho también se conoce como tiñosu, y el pastel de este pescado de roca está presente en prácticamente todas las sidrerías y tascas asturianas como aperitivo o tapa.
Hay muchas formas de hacerlo, pero sin duda esta es una de las más sencillas y sabrosas. Si quieres saber cómo hacen este pastel en tierras asturianas sigue leyendo, te damos todas las claves y trucos para que te salga espectacular.
Ingredientes que vamos a necesitar
- 250 gr de cabracho
- 3 huevos
- 50 gr de gambas frescas
- 6 palitos de surimi
- 125 gr de salsa de tomate
- 1 cucharadita de salsa inglesa o Perrins
- 250 ml de nata líquida para cocinar
- Una pizca de sal y pimienta negra molida
- Mantequilla y pan rallado para engrasar
Herrramientas
- Un molde rectangular de 22 cm de largo
Indicaciones para hacer el pastel de cabracho asturiano
- Pelamos las gambas y las cocemos durante 2 minutos en una cazuela con dos dedos de agua, sólo el tiempo justo para que cambien su color pálido a uno más rosado. Sacamos las gambas con una espumadera a un plato aparte.
- En ese mismo agua, ponemos a cocer el cabracho a fuego fuerte, sólo hasta que se vea que ya no está crudo. No es necesario cocinarlo del todo ya que después se terminará de hacer en el horno.
- Precalentamos el horno con calor por arriba y por abajo a 200ºC.
- Retiramos el pescado del fuego y sobre una tabla de cortar, eliminamos todas las espinas que veamos. Es importante tomarnos nuestro tiempo para hacer esto, pues a nadie le gusta encontrarse una espina o una escama en el pastel. La piel la vamos a dejar, pues es gelatinosa y da mucho sabor.
- Cortamos en trozos el pescado y lo agregamos a una batidora de vaso junto con las gambas, los huevos, los palitos de surimi, la salsa de tomate, la nata, 1 cucharadita de salsa inglesa, un poco de sal y pimienta negra. Todo esto lo trituramos hasta que tengamos una salsa fina. Le añadimos más sal si es necesario.
- Preparamos un molde tipo plum cake y lo engrasamos con mantequilla y pan rallado, o podemos simplemente recubrirlo de papel de film para que se pueda desmoldar fácilmente.
- Vertemos la mezcla en el molde y lo cubrimos con papel de aluminio por encima. Colocamos nuestro molde dentro de otro recipiente apto para el horno más grande, y vertemos agua caliente para crear un baño María.
- Introducimos todo en el horno y reducimos la temperatura a 100ºC. Dejamos que se cocine durante 1 hora y comprobamos la cocción pinchándolo con un palillo, si sale limpio es que ya está cuajado.
- Lo sacamos del horno y dejamos que enfríe a temperatura ambiente. Seguidamente lo introducimos en el frigorífico para que se endurezca. Ya podemos desmoldarlo y servirlo acompañado de una salsa rosa o mayonesa.
Para seguir disfrutando en la cocina nada mejor que unas recetas de solomillo de cerdo y de unas riquísimas albondigas en salsa. Y es que si hay algo infinito es el número de ideas y platos por cocinar. ¡Anímate a probar nuevas recetas!